Algo de la poesía publicada recientemente en la Argentina.
sábado, 18 de junio de 2016
Juan Rapacioli
Juan Rapacioli (Buenos Aires), Dispersión, Buenos Aires Poetry, Buenos Aires, 2015.
el miedo viene después
el miedo viene después
empieza con un relieve
un giro en el mapa
y una inversión en la superficie
antes
en la edad previa
la no sucesión
el cuadro está desordenado
las piezas no son un espacio
útil
constituido
configurado
para usar con cautela
prudencia o coraje
no hay movimiento intrépido
en la niñez
no hay valentía
porque no hay miedo
el miedo viene después
llega de algún modo
representado en formas y maneras
también en personas
alguien
determinado y determinante
es la cara del miedo
la casa que no se puede visitar
el pariente que nunca aparece en la foto
el conocimiento
silencioso
de que no habrá nadie esperando
del otro lado de la puerta
eso que no queremos que pase
nos espera con una mueca siniestra
detrás de la sonrisa amable
pensar un río
pensar un río es marcar medidas en el espacio
dibujar el fluir de los acontecimientos
en la relación de seres y materia
otra cosa es ver un río
la superposición de sonidos
que hacen muchos ritmos
y un mismo ritmo a la vez
ver un río es partirse al medio
por un lado
la continuidad que nos conduce
a quién sabe dónde
por el otro
un alto en el tono de los días
llegar al río es en sí mismo un cambio de luz
los colores, desde los precisos hasta las manchas,
enredados por oscuridades selváticas,
se abren hacia una perspectiva que fuga al cielo
y se despega del verde
pensar un río es no explicarse la existencia
afrontar lo inevitable de sentir el tiempo
la idea circular que nos arroja al fluir de nuestra fe
en esos argumentos propuestos por la especulación
ordenados por el pensamiento
nuestro insaciable y caprichoso dios
veo un pájaro volando
veo un pájaro volando
y por un momento
recuerdo que no
puedo entender
la realidad
el pájaro está quieto
sobre una roca
mirando a su alrededor
de pronto echa vuelo
toma lento impulso
gira sobre sí mismo
y se aleja
en círculos
el pájaro no pide ser mirado
ofrece un espectáculo impecable
una experiencia estética
apunta con el pico en bajada
hacia su izquierda
traza una curva perfecta
para extender sus alas
hacia la derecha
y perderse por un costado
del lago que cruza el parque
ver el pájaro
ver su vuelo
es ver también
una representación del tiempo
el pájaro vuela hace siglos
el vuelo es prehistórico
a su manera desafía al futuro
estimulando a la humanidad
a construir grandes máquinas
que transportan vidas por el cielo
reafirmando el peso que esa palabra
vuelo
tiene para el mundo
o simplemente volando
cumpliendo su función animal
viviendo para y por su especie
ajeno a metáforas y clasificaciones
que no encuentran más que ruido
en un mundo que no habitamos
pero que nos habita
el vuelo del pájaro hace
en un momento
un quiebre en la percepción
hace incomprensible
esta simultaneidad
de experiencias
que nombramos realidad
hace imposible la convivencia
de tantas fuerzas
en un orden universal
el vuelo viene a recordarnos
que este planeta
sigue moviéndose
extrañamente
y que el pájaro seguirá
despegando del suelo
en acto mágico
para conocer el futuro
el vuelo del pájaro
es como la risa o el río
nos hace saber
que no sabemos nada