La inoculación de lo humano, Maravillosa Serendipia, 2020.
De "Génesis de lo aprensivo"
De
"Génesis de lo infinito"
VI
Hechas con un molde resistente,
de finísimo abrazo y tierra blandecida,
con pecas que ocultaron
el rechazo de la hélice,
con ardores
que reprimieron
en la infancia.
Aprendieron la métrica, la rima y el verso.
A contonearse sin ser notadas.
¿Qué sentirán las amadas por sus padres?
De "Crónicas de la
radióloga"
IV
La radióloga vivía con nosotros.
Cuando padre se fue,
decidió quedarse.
Se victimizó
unas semanas,
hasta que madre dijo
que ella separaba las cosas.
En el régimen militar
madre era salomónica.
El agua y el aceite no se mezclan.
Pero conviven.
La radióloga me obligaba a cerrar
los ojos y a dar la vuelta
cuando se cambiaba.
Un día los abrí antes de tiempo
y un círculo solar
quedó pegado en mi retina.
Contó los segundos
y arrancó de la oreja
la gasa y la venda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario