Marina Serrano (Quequén/Olivos, Buenos Aires), Psiquis anatómica, Ediciones en Danza, Buenos Aires, 2016.
Infibulación1
Los enterrados
en el patio de los conventos,
en las casas de
familia, los que se van por los caños,
encéfalos
verdes,
no tienen
importancia.
Si se acaba en
el acto de dar a luz, que no se sepa.
Si se acaba, que
no se sepa. Y si no, que no se sepa.
El no evidente
principio de la independencia,
el placer, es la
diana desafiante
del hombre.
1 Infibulación: del latín in/
Espinos de
acacia enana cierran los bordes, y la sangre corre
por el
hueco de una caña.
En nombre
del gran desconocido, las mujeres
han
vengado su propia ablación con otra.
La
rajadura en el tegumento eréctil,
en los labios,
deja
errando
por la tierra
de la
obligación, del sufrimiento,
ese surco
esa ternura, que no puede siquiera llorar
ante la
hembra, primate, cetáceo, cánido,
que goza
la ingurgitación de su sexo.
/ 'en', 'dentro', 'hacia dentro',más fībula 'hebilla', 'broche', más -ā-tiōn(em) 'acción'. Derivado de palabra
antigua infībulātiōn(em) derivado del
latín infībulār(e) 'perforar para
abrochar'; aplicado al cierre de la vagina mediante un anillo o broche.
Suicidio1
Los zapatos
acomodados en la orilla, la pollera oscura,
y el orden de
las cosas mínimas,
no como
celebración sino por costumbre.
Hunde sus arcos
en la pulpa tibia blanda y turbia,
el descanso de
la carne es su entrega
a las mordidas
de cangrejos que trepan hacia la matriz
por aductores
que no tardarán en volverse escarcha.
Otros animales
aguardan esa escarcha,
el fin del
movimiento, el beneficio de lo que cicla
y se deshace.
Nadie sale del
río como ha entrado,
aunque haya
entrado muerto.
1 Suicidio: del latín sui/
Nadie es
capaz de odiar a otro
tanto
como a sí
mismo,
su fuerza
y constancia es inaudita,
y mentira
infantil
de la
violencia, creer
que luego
se estará mejor.
Porque no,
no se
estará de ninguna manera,
nunca, más
allá del amor.
/´de sí mismo´, y caedĕre, ´matar´. Matar, según la DRAE
es de origen discutido. Algunos han propuesto que viene de mactare, un vocablo de la lengua religiosa que significa sacrificar
(un animal) a los dioses. Pero esta palabra no se usaba para expresar la idea
de matar a una persona, la cual se expresaba con occidere, interficere, necare o interimere.
Según Corominas, vendría del latín vulgar mattare
(golpear) derivado de mattus
(estúpido, dio matto en italiano).