sábado, 24 de enero de 2015

Denise León




Denise León (Tucumán), Poemas de Middlebury, Huesos de Jibia, Buenos Aires, 2014.

















Dice que es atravesada
por los agujeros
de la red
como una calle
es atravesada
por la gente;
atravesada
por un dedo
huesudo
y largo.


La red
es un comienzo
posible,
una pregunta
por la que te sigo
y me escapo.


Una red
que no recogió
el fruto
ni el milagro.
Lisa
–como
un vientre infecundo–
se sumerge
a pesar de todo
de espaldas
al río.











Y se vive.

La desgracia
con sus dedos hábiles
ha apagado
todas las lámparas.


Vemos la jaula.


Oímos el aleteo.


Esta inercia
tiene algo
del sanatorio
del tratamiento
del cuarto de la enferma
de la vida sucia
e irrespirable
por donde nos hemos venido
arrastrando.


Ninguna voz para apoyarse.
Ningún cielo.


El pez
piensa en el agua
mientras puede.
En el agua del vaso de agua
del cántaro de agua
del viento en el agua
de la red
en el agua
de los agujeros
en la red

como quien
se tapa
la cabeza
con la sábana.





















Laura García del Castaño




Laura García del Castaño (Córdoba), El animal no domesticado, Pan Comido, Córdoba, 2014.
















Adentro están velando a un hombre
es el tío del chico que afuera
cuenta figuritas
coloca varias de pie contra una puerta
con una carta derriba otra carta
con un hombre derriba otro hombre
Repasa el maso
elige del medio el dragón de hielo
prueba otra vez
Así ha sido toda la tarde
Así es adentro
El auto en el que fueron a ver la nieve
Un hombre cenando en casa con sus costillas rotas
y otro volteado aquí
entre las figuritas que un dios desprevenido
vuelve a contar.